Yes, my friend. Si quieres que tus seguidores vuelvan a por más, necesitas copywriting en tus redes sociales y no lo digo solo porque sea copy, que también, sino porque para hacer que tus publicaciones sean superadictivas, tendrás que añadirle algo de sugar.
Y eso es precisamente el copywriting: “azucar” para tus publicaciones.
Pero, ¿cómo puedes saber si lo que quiero es venderte la moto o si estoy diciendo la verdad? Pues quédate en este post, descubre el poder de la palabra escrita en social media y decide si resuena contigo lo suficiente como para probarlo.
Antes de nada, revisemos si tu situación es una de estas dos:
- Pasas horas planificando contenidos, creando el calendario, diseñando las imágenes, retocando o buscando fotos, grabando los vídeos, haciendo pruebas para saber la mejor hora de publicación… No sigo, que es agotador.
- Pagas a un profesional para que se encargue de hacer todo eso por ti, porque, o no te gusta, o no puedes desatender otras áreas de tu negocio.
De cualquier forma,es probable que inviertas mucho tiempo o dinero (quizás ambas, en el peor de los casos) y aún así debas lidiar con la dura realidad:
Tus creaciones pasan sin pena ni gloria por el feed de tus seguidores (si es que el algoritmo te muestra) y ya no sabes qué hacer.
Pues bien, aunque el copywriting en tus redes sociales no va conseguir un milagro, es importante que sepas que todo suma.
Por lo tanto, cualquier arma que te ayude a ganarle el pulso al algoritmo, de vez en cuando, para crear comunidad y conseguir mayor visibilidad, merece al menos conocerla.
Y aquí estoy yo, a punto de contarte cómo hacer (un buen) uso de ella.
¿Comenzamos?
Qué es copywriting para RRSS y por qué es importante saber aplicarlo
“Los vídeos lo están petando, todo el mundo está priorizando ese tipo de contenidos frente a otros”; “Necesitas publicar, al menos, 1231212312 veces a la semana”, “debes añadir más carruseles a tu feed…” ¿Te suena?.
Lo cierto es que de tendencia en tendencia hemos acabado haciendo todos lo mismo y ha llegado un punto en el que si no eres capaz de bailar como Chanel su SlowMo, olvídate de los 12 puntos (el equivalente a un comentario en redes sociales).
Y es que la competencia es tan bestia que es que ya ni cuentan los likes. Lo que más se premia ahora es la interacción y el tiempo de permanencia en las plataformas.
Pero, espera. No pienses que quiero pasarme de catastrofista. Todo lo contrario.
Quiero que sepas que se puede sacar mucho partido a las plataformas digitales. Sobre todo si implementas un buen copy en cada una de tus acciones de visibilidad.
¿Y de qué va eso del copywriting para redes sociales? De utilizar la palabra escrita orientándola hacia objetivos específicos e implementando técnicas de persuasión para captar la atención e interacción de tus seguidores.
Cuando digo objetivos estoy aludiendo, por un lado, aquel que te marques individualmente con cada una de las publicaciones, pero también me refiero al objetivo mayor que te hayas marcado en cada red social donde tengas presencia.
Y es que para escribir textos persuasivos y estratégicos no tienes que hacer mil cursos de copywriting nivel gurú. Solo basta con que entiendas que escribir por escribir no sirve de nada.
Todas las redes sociales tienen un lugar para los textos, porque te ayudan a darle contexto a tus contenidos. De hecho, está más que probado que las historias enganchan más que las telenovelas, pues además de entretenimiento, la gente busca el salseo…
Hasta las redes sociales donde el vídeo es el formato por defecto, añadir subtítulos y textos extra superpuestos funcionan mejor que los que obligan al usuario a encender el sonido del smartphone.
Ahora bien, no vale con hacerlo de cualquier manera. Porque si no lo leen o no les atrae lo que cuentas, estarás perdiendo cantidad de tiempo (y oportunidades).
Escribir por escribir, no. Aburrir con tus movidas, ni de chiste. Enrollarte como las persianas, ni se te ocurra.
Tienes que dejar con ganas de más. Dar mucho amor, pero sin abusar.
Como si se tratase de un juego de seducción, no dirías “te amo” en la primera cita, ¿o sí?
Lo suyo es llamar la atención, generar intriga, despertar el interés y luego conseguir una audiencia más enganchada a tus publicaciones que al mismísimo juicio entre Johnny Depp y Amber Heard.
Cómo debe ser tu copywriting según la red social en la que publiques
Esto que te voy a decir ya lo sabes, pero por si acaso acabas de aterrizar en el mundo del marketing digital, te cuento: no tienes que tener presencia en todas las redes sociales.
Lo primero que tienes que averiguar es cuáles son las redes sociales que tu público objetivo mira hasta cuando se va al baño. La media diaria es de 2 horas y 27 minutos. ¡Diaria! Y la tendencia en los últimos años ha sido siempre ascendente.
Así que haz este ejercicio previo de investigación para poner tu tiempo, energía y dinero en aquellas plataformas en las que creas que el retorno de inversión va a darte un saldo positivo.
Una vez que selecciones con qué redes sociales vas a trabajar, tienes que seguir haciendo un trabajo de análisis: no todas funcionan de igual manera. Cada una tiene su dinámica, funciona con diferentes reglas (no escritas). Así que es importante que mantengas el tono de tu marca en las diferentes redes, pero sin perder de vista que te diriges a públicos diferentes.
Por eso voy a contarte cómo aplicar copywriting en 3 de las principales redes que existen: Instagram, LinkedIn y Twitter.
Copywriting para Instagram
A pesar de que Instagram es una red social en la que prima el contenido visual, los textos juegan un papel relevante a la hora de conseguir un crecimiento notable de tu comunidad.
Tanto si creas contenidos educativos con píldoras útiles, o si utilizas frases inspiradoras para crear vínculos, o la usas para preguntar y estar en contacto con tu comunidad: los textos te ayudan a destacar.
Hay copywriting en:
– Tu bio.
– Tus publicaciones.
– Tus vídeos, stories o reels. (Porque todo guion lleva texto, ¿no?)
Si algo diferencia un buen copy de uno malo, es su capacidad para explicar algo de manera inequívoca y provocar interés.
Por eso, uno de los retos en Instagram es conseguir tener una bio que explique de forma clara y concisa qué haces, y por qué es relevante lo que haces para que la gente quiera quedarse.
Mira lo bien que lo hace Charuca:
Son muy pocos caracteres ,por lo que necesitas la precisión de un cirujano y la originalidad de un monologuista.
En las publicaciones tienes mucha más libertad para expresarte, pero igualmente es necesario que juegues tus cartas de forma inteligente.
Las primeras palabras tienen una misión súper importante: generar ganas de seguir leyendo. Por eso, procura elegir la parte más impactante de lo que quieras transmitir para hacer que tus lectores se paren en seco.
Fíjate, aquí arriba, en lo que hace Comunicazen.
Inicia esta publicación realizando una pregunta con la que puede identificarse su público objetivo y, acto seguido, explica lo que hay detrás de cada venta que realizas de algún producto o servicio.
Piensa que después de captar la atención de tus lectores, con una reflexión, pregunta o afirmación, el resto del contenido debe responder a esa curiosidad que has generado.
Por otro lado, es recomendable que utilices saltos de línea a lo largo del texto para facilitar su comprensión y que te apoyes en emojis para hacerla más visual.
Al final, es muy importante que cierres con una llamada a la acción: ¿cuál es el objetivo de esa publicación? ¿que comenten?, ¿que compartan?, ¿que te insulten?
No des por hecho que la gente reaccionará a tus publicaciones, solo porque sí. ¿Que quieres que dejen un comentario? Lanza una pregunta que no les deje indiferentes.
¿Que prefieres que lo compartan? pídelo y explica a quién puede servirle de ayuda.
¿Que lo que buscas es que te den amorcito? PídeLOVE y se te dará. ❤️
Esto que puede parecer evidente, no lo hacen todas las cuentas. Pero allá ellas, la tuya no es una más del montón…
Mira como lo hace @ninosdeahora, que pregunta directamente algo relacionado con su publicación y voilà, casi 50 respuestas en comentarios 🙂
En cuanto a los vídeos, reels y stories, aprovecha el poder de los textos y añádele ese toque único para crear curiosidad, captar interés y generar interacciones.
Haz que sea provocador o levante sonrisas, lo importante es que se ajuste a tu tono, estilo u objetivos y eso sí, que no deje a nadie indiferente.
Copywriting para LinkedIn
En la red social de los profesionales los textos tienen mucha más importancia. No me refiero a que tengan que ser gramaticalmente correctos, sino a que estén bien estructurados y tengan la capacidad de ser interpretados por personas con menos conocimientos que tú sobre tu sector.
Al fin y al cabo, para conseguir ser un referente, donde te codeas con otros colegas de profesión, necesitas conectar con aquellos que tienen menos experiencia y que quieren aprender de ti.
Evita a toda costa parecer perfecto. Sin duda, la soberbia es el pecado capital más presente en esta red social. Las técnicas del copywriting tratan de destacar, diferenciarse y llamar la atención sin caer en la pedantería.
Si lo que buscas son posibles clientes, aplican los mismos consejos: tienes que mostrarte “humano” y accesible.
¿En qué secciones puedes utilizar la persuasión?
- En el titular: que es lo primero que van a leer todos los que vean un comentario tuyo, o cuando les aparezcas en una búsqueda. ¿De verdad crees que poner que eres CEO es lo más atractivo de tu faceta profesional?
- En el extracto, la sección “acerca de”: aunque seas un empleado contratado por cuenta ajena, ¿no te gustaría diferenciarte del resto de profesionales que hacen lo mismo que tú? Aquí tienes una oportunidad de oro para que piensen que eres único, pero sin decirlo tú, porque sonaría arrogante. A mi modo de ver, esta sección es el lugar perfecto para escribir una mini página de ventas en la que te comprarán a ti.
- En las solicitudes para conectar: si aprovechas la solicitud para escribir unas palabras diferenciadoras, inesperadas, amables y personalizadas a esos contactos que quieres tener en tu red, multiplicas la probabilidad no solo de que acepten, sino de que encima abran diálogo contigo. Aprovecha esa mensajería directa para conectar.
En cuanto a las publicaciones, te sirven las mismas recomendaciones que en Instagram. Empieza con lo más curioso o destacado, esas primeras palabras que se leen. El objetivo es que pulsen “ver más”. Con eso, créeme que ya has ganado en visibilidad porque LinkedIn mostrará a ese perfil tu contenido con más frecuencia.
El resto de la publicación, pues ya sabes: con un lenguaje sencillo, con espacios, contando todo aquello relevante para tus contactos. Y acaba con una llamada a la acción: ¿qué quieres que haga el que llegue hasta el final de la lectura?
Una pista, los comentarios funcionan mucho mejor que los likes o compartidos.
Pero si lo tuyo es el B2B y quieres profundizar en la forma más efectiva de escribir para esta plataforma, en este artículo de copywriting para LinkedIn te cuento con lujos, memes y detalles todo lo que necesitas saber.
Copywriting para Twitter
¿Qué crees que te voy a contar de la red social en la que los protagonistas son 280 caracteres? Pues que para enganchar con textos tan cortos, tienes que mantener el lápiz afilado.
Aunque publiques vídeos o fotos, aquí lo que prima es el texto. O mejor dicho, lo que cuentes. Las historias son un filón. Y los hilos son ideales para dar rienda suelta a esas anécdotas con las que conectar, aportarle un montón de valor a tus seguidores y construir una comunidad fiel.
Mira este ejemplo, de Rubén Máñez. Inicia su publicación con las preguntas que, casi con seguridad, se hace su público objetivo y que responderá en un hilo muy completo para que sus seguidores quieran seguir leyendo.
Aprovecha para abrir boca con un primer tuit cuyo contenido provoque que el usuario deje de hacer scroll para leer eso que has puesto. Y abre hilo para darle contexto y contar el resto.
Sé breve, nada de irte por las ramas. Conciso, preciso, entretenido, una vez más humano y cercano.
¿Al final? Ya lo sabes, llamada a la acción.
Igualmente, tu biografía y lo que cuentas en ella es una de los factores que más se tienen en cuenta para conseguir followers. ¿Serás capaz de ser original y resultar atractivo?
3 fórmulas de copywriting más comunes en las redes sociales
Como he insistido varias veces en la necesidad de empezar tus copys con algo que llame la atención y cerrarlas con una llamada a la acción, creo que es justo darte las herramientas para hacerlo. Me refiero a las fórmulas de copy más utilizadas:
Por favor, piensa que las fórmulas son una manera de orientar tus textos y darle estructura. Sin embargo, si no conoces a tu público objetivo, si lo único que haces es hablar sobre ti o si enfocas sus problemas desde la perspectiva correcta, ni que logres resucitar al mismo Sugarman conseguirás resultados.
Dicho esto, repasemos algunas:
- La fórmula AIDA: que responde a llamar la Atención (en periodismo se llaman titulares), generar Interés (tocando uno de los puntos de dolor de tu público), seguir con algo que provoque Deseo o empatía (dale pomada a ese dolor, que no queremos dañar a nadie) y pidiéndole que pase a la Acción (comentar, responder, compartir, que te escriban por privado…).
- La fórmula PAS (Problema – Agitación – Solución): abres el texto tocando ese punto de dolor, hablando de lo que pasará si el problema crece o si tus lectores no pasan a la acción y ofreciéndole una solución a ese problema. No dejes esa herida abierta, piensa que quieres conectar a nivel emocional.
- La fórmula ADE (Antes – Después – Enlace): esta forma de estructurar los textos es muy efectiva cuando quieres hacer uso del storytelling. Cuentas una historia y haces que la moraleja guarde relación con tu llamada a la acción (o directamente un enlace).
- La fórmula sin fórmula: sí, leiste bien, no se trata de ningún error. Las publicaciones más humanas, cercanas y genuinas pueden ganar muchísimo más engagement que el carrusel más elaborado.
¿No me crees? Compruébalo por tus propios ojos.
Errores de copywriting que no puedes cometer en tus Redes Sociales
Ahora voy a ir al grano con consejos que tienes que tener en cuenta siempre que escribas tus copys en redes sociales. Aplica para cualquiera, así que toma nota:
No te enrolles: no estoy diciendo que todos tus copys tengan que ser cortos. Si el tema engancha y entretiene, aprovecha (de hecho funcionan muy bien), pero no caigas en el pecado de resultar repetitivo.
Si por algo funciona el copywriting, es por su capacidad de síntesis: utilizar las palabras adecuadas y no andarse por las ramas. Podría seguir dándote explicaciones, pero cometería un grave error… ya me entiendes. 😉
Olvida la tacañería, compartir es vivir 🙂 Me refiero a que necesitas contar y explicar las cosas. No asumas que quien ve tu publicación va a entender lo que tú crees que va implícito en unas pocas palabras. Sé explícito y detente a poner en contexto los argumentos para que resulten de fácil comprensión a tus seguidores.
Emojis sí, pero olvídate de poner un carnaval de caritas: una publicación sin emojis es como un postre sin azúcar… insípido. Pero, no debes abusar.
Cuida la legibilidad pero evita añadir muchos de ellos o ponerlos en mitad de una frase. Esto hará que tu texto sea difícil de entender y que la gente pierda el hilo de la historia.
Olvidarte del CTA: a riesgo de repetirme más que el ajo en un gazpacho andaluz, es de los “horrores” que más me encuentro cuando audito los copys de redes sociales de mis clientes.
Contar las historias cronológicamente: ¿érase una vez? Olvídate de eso, para comenzar un texto mejor impacta con algo que llame la atención. La próxima vez que veas un capítulo de una serie fíjate en cómo comienza. ¿Objetivo de esas escenas? Que quieras ver el resto y olvides el mando a distancia.
No utilizar copywriting entre bambalinas. Lo más interesante de las redes sociales es precisamente lo que no se ve públicamente. Y no me refiero a los perfiles privados, sino al uso de la mensajería directa. ¡Eso es un filón si lo trabajas bien! Pero no de cualquier manera: ni se te ocurra abrir una conversación tratando de vender algo a ese nuevo seguidor al que le das las gracias por seguirte.
Si no lo dirías así cara a cara, ¿por qué habrías de hacerlo online? Pues, sí. Aplican “casi” las mismas normas. Socializa, empatiza, abre vías de comunicación pero con mensajes distintos, sin formalidades. A nadie le gustan las conversaciones de ascensor.
Como conclusión, te diría que “un dulce al año, no hace daño” o lo que es lo mismo, nada mejor que ponerle a tus textos chispas de originalidad, cercanía y actitud, para romper las barreras de la distancia digital y darle “sabor” a tus publicaciones.
Prueba añadir un poco de sugar a tu comunicación y aplicar copywriting del bueno en tus redes sociales.
No podrán resistirse a lo que cuentas y querrán repetir una y otra vez.
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