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March 22, 2023 Milena Figueroa Leal

El estilo no es sólo lo que usas, sino también lo que proyectas

Carolina Herrera

 

Elegí esta maravillosa frase de la incomparable Carolina Herrera porque ilustra perfectamente lo que quiero compartir contigo en este espacio. No sólo la frase, sino la autora.

 

¿Conoces a Carolina Herrera?

 

¿En qué piensas cuando digo Carolina Herrera?

 

Algunas personas responderán inmediatamente 212, Good Girl, 212 VIP y otras fragancias inolvidables.

 

Otras personas, tal vez de la generación anterior, responderán moda, bolsos y accesorios.

 

Y un grupo, tal vez más reducido te dirá que Carolina Herrera es la imagen misma de la elegancia, el glamour y la sobriedad. Una mujer que ha llevado cada década de su edad con gracia y que puso en el mapa la clásica blusa blanca.

 

Por esta razón quise iniciar este espacio haciendo referencia a esta increíble mujer que desarrolló un imperio de la moda, manteniendo su Marca Personal Comercial muy bien cuidadas por separado, aun cuando ambas llevan el mismo nombre.

 

 

Seguro que también te interesa:

 

 

 

Arquetipos femeninos modernos

 

¿Qué es la marca personal?

 

La Marca Personal se ha puesto de moda y, para algunos, se refiere a un logo, un slogan, una idea que se vende en redes sociales. Nada más alejado de la realidad; la marca personal se refiere a cómo presentas tu combinación única de habilidades, experiencia y personalidad, así como tu mirada acerca de las cosas y forma de abordar los temas.

 

Recuerda que cuando emprendes en la era de la información (la era en que entre el cielo y las redes sociales no hay nada oculto), tu marca personal (que eres tú) y tu marca profesional o comercial (que es el mensaje que difundes y el producto o servicio que ofreces) son diferentes pero van de la mano.

 

Jeff Bezos dijo en broma que la marca personal es “… lo que la gente dice de ti cuando no estás en la sala“.

 

Tomamos el ejemplo de Carolina Herrera, comenzando por la personal:

 

¿Qué idea o mensaje proyecta?

¿Cómo se vende esa imagen?

¿Cómo la percibes?

 

Ahora, con eso en mente, vamos a sus líneas de producto:

 

¿Qué productos vende?

¿A qué segmento del mercado apunta?

¿Qué tipo de mujer (aunque tiene fragancias masculinas, vamos a enfocarnos en lo femenino) quiere adquirir esos productos?

 

Las marcas y las personas que están detrás están íntimamente relacionadas. Si soy una persona alegre, jovial, que disfruta de las bromas y los chistes… ¿podría impulsar una marca sobria, elegante y glamurosa como Carolina Herrera?

 

La respuesta es NO. Es maravillosa, pero no soy yo.

 

Si, por el contrario, soy una persona muy seria, enfocada en resultados y apegada a los procedimientos, psico rígida y cuadriculada, ¿podría impulsar la venta de gamificación de procesos? La respuesta es TAMPOCO.

 

Me explico: no significa que la gamificación no requiera de método, cuidado y atención, o que las fragancias de CH no sean para gente alegre; es un tema de percepción y un tema de coherencia.

 

Volviendo a la frase de Bezos, “lo que la gente dice de ti cuando no estás en la sala”.

 

Es lo que queda en la mente de la gente. Y la imagen que queda en la mente de la gente respecto a mí, va a impactar en la percepción que tengan de mi marca.

 

Siendo así, te pregunto:

 

¿Qué está diciendo la gente de ti cuando no estás?

 

¿Qué imagen estás proyectando a los otros?

 

Aquí es importante aclarar que la imagen que la gente crea y recuerda de ti, no siempre se trata de la imagen que quieres proyectar, sino la que proyectas aun sin querer, desde tus acciones y reacciones; esta imagen que se relaciona con lo que dices, haces y sientes.

 

 

Arquetipos y comportamientos

 

Los Arquetipos son figuras que simbolizan personajes que, aunque son universales, viven en tu mundo interno y marcan lo que piensas, dices, sientes y haces.

 

Funcionan como programas conductuales, se fueron consolidando desde tu infancia, marcado por todo lo que hicieron y dijeron tus padres o adultos significativos, se almacenan en la memoria inconsciente y actúan como guías de actuación en situaciones sociales.

 

La clasificación más conocida de arquetipos la hizo el famoso psiquiatra, psicólogo y ensayista suizo Carl Gustav Jung, quien entendió los arquetipos como patrones universales que derivan del inconsciente colectivo y son la contraparte psíquica del instinto.

 

Como ves, el arquetipo impulsa a una actuación opuesta al instinto. El instinto nos mueve a la actuación que protege nuestra vida, seguridad e integridad; el arquetipo nos mueve hacia una actuación aprendida que forma parte de un guion, protege nuestra seguridad social, buscando el éxito o la pertenencia al grupo desde lo que debería ser.

 

 

Las mujeres y los arquetipos

 

Al hablar de arquetipos femeninos, es indispensable nombrar a Jean Shinoda Bolen, quien hace un trabajo magnífico de arquetipos de Diosas Griegas en su obra Las diosas de cada mujer.

 

En este trabajo, la autora nos entrega 7 arquetipos femeninos maravillosos que explican el comportamiento social femenino:

 

 

-Artemisa

 

Arquetipo: La Cazadora. Diosa de la Caza y de la Luna.

 

Se le representa con una túnica muy corta, un arco y un carcaj. Espíritu independiente

 

 

-Atenea

 

Arquetipo: La Guerrera. Diosa de la Sabiduría y la Artesanía.

 

Se le representa con Escudo, Lanza, armadura y yelmo. Estratega, Hija de su Padre. Privilegia lo que le importa por encima de las necesidades de los demás

 

 

-Hestia

 

Arquetipo: La Sabia. Diosa del fuego del hogar y de los templos.

 

Es el fuego del hogar, proporciona sentido de integridad y totalidad. Meditativa, intuitiva, posee claridad interna en medio del caos.

 

 

-Hera

 

Arquetipo: La Esposa. Diosa del matrimonio, artífice del compromiso.

 

Se le representa con una diadema y un cetro, como símbolos de poder. Busca el reconocimiento externo. Se ve a sí misma como la mitad de una pareja, necesita el ritual de hacer público su compromiso, por lo que el matrimonio es tan importante para ella. Vive en función de su pareja, tanto en sus deseos, como en su trabajo, decisiones, amistades, etc.

 

 

-Deméter

 

Arquetipo: La Madre. Diosa de las Cosechas – Cuidadora.

 

Suministra apoyo y sustento tanto físico, como psicológico, emocional y espiritual. Cuando se siente usada o mal retribuida, suele caer en juegos pasivo-agresivos.

 

 

-Perséfone

 

Arquetipo: La Doncella. Es la Reina del Inframundo. Hija de la Madre, mujer receptiva.

 

Se deja llevar por los demás o por las circunstancias. No toma decisiones.

 

 

-Afrofita

 

Arquetipo: La Amante. Diosa del Amor y la Belleza. Mujer Creativa.

 

Disfruta de amor, la belleza la sexualidad y la sensualidad. Personalidad magnética y atractiva.

 

 

Arquetipos femeninos modernos

 

Todas hemos sido criadas reforzándonos un guión que nos prepara para interpretar un papel. Probablemente, muchos de los arquetipos tradicionales han estado presentes en nuestra vida, pero los tiempos cambian, los roles esperados también (por suerte) y, por esto, hoy miraremos un poco estos guiones femeninos modernos.

 

De acuerdo con la incorporación que hacemos de los mensajes que recibimos durante nuestra infancia y preadolescencia, generamos nuestros propios libretos. Al crecer, actuamos de forma que la creencia se refuerza con la experiencia y vamos puliendo poco a poco el personaje, creando así la obra de nuestra vida y nuestras relaciones, tal vez como comedia, drama o tragedia.

 

Algunos de los libretos que más comúnmente encontramos, son:

 

 

La Niña Buena

 

Se caracteriza por ser muy eficiente, amable, cordial, servicial. Se ajusta perfectamente a los roles de apoyo, siempre cumple con lo que se espera de ella.

 

¿La has visto? Es esa compañera de equipo que siempre está dispuesta a apoyar a todos, nunca lleva la contraria a la mayoría y no aporta su punto de vista si va a contracorriente.

 

 

Wonder Woman

 

Suele ser una mujer fuerte y decidida. Es muy eficiente y genera valor al equipo y la organización. Se centra en los objetivos y los resultados, es competitiva y no pide o recibe ayuda.

 

¿La conoces? Es esa súper mujer que compite con los hombres en su propio terreno y gana; parece que siempre estuviera disgustada o concentrada en algo, poco se le ve sonreír, nunca está triste o preocupada.

 

 

La Madre Sacrificada

 

Deja su carrera para dedicarse en exclusiva a la crianza de sus hijos. Toma voluntariamente esa decisión, sabiendo que los años formativos son los más importantes y que ya luego, puede retomar su desarrollo profesional donde lo dejó.

 

¿Y qué ocurre? Que no es así, el mercado la olvidó, la brecha temporal en su hoja de vida le afectó o se desactualizó de las tendencias en su área y ahora se siente como pez fuera del agua.

 

 

Ejecutiva Multitasking

 

Es una mujer con mucho empuje e iniciativa; lidera proyectos y equipos con un talento natural, al mismo tiempo que se desempeña impecablemente como esposa, madre, preside la junta de vecinos y organiza eventos de recaudación de fondos para una fundación local.

 

¿La has visto? Es una candidata perfecta para un burnout, aunque no lo reconozca.

 

 

La Chispeante

 

Es una mujer alegre y chispeante, conecta fácilmente con su niño interior. Como miembro de equipo, mueve a todos desde el entusiasmo, presta ayuda a todo lo que se necesite y puede liderar iniciativas, al igual que seguir lineamientos de otros, en todo aquello que le entusiasme.

 

¿Cuál es? Es esa que les alegra la vida a todos en el trabajo, los equipos, los paseos.

 

 

La Súper ocupada

 

Es una mujer “multitasking” por naturaleza, y que anda apurada a todo momento. No parece alcanzarle el tiempo y se puede agotar con frecuencia. En algunos casos puede caminar, hablar, comer y conducir muy rápido. En otros casos, se ve como una persona apacible, pero su mente va a toda velocidad.

 

¿La conoces? Es la que termina el día fundida de cansancio y puede, en algunos casos, agobiar a otros.

 

 

La Workahólica

 

Es una mujer dedicada en cuerpo y alma a su trabajo; se mantiene ocupada todo el tiempo y literalmente “Vive” para su trabajo o emprendimiento. No toma vacaciones de su trabajo y ,si las toma, las aprovecha para poner al día los pendientes o se involucra en proyectos extralaborales. Se desconecta poco a poco de las actividades sociales y sus amistades.

 

¿Sabes quién es? Es la que se escuda bajo el estandarte de “yo amo mi trabajo” o “yo disfruto lo que hago, porque es mi pasión”. Vivir para trabajar es el sinsentido de la Era. Aunque pareciera que el equilibrio vida – trabajo es una utopía, todas vamos, al menos, intentando balancearnos. La workahólica ni siquiera lo intenta, se enorgullece de su situación.

 

 

Perfil Bajo

 

Es la mujer que prefiere hacer todo el trabajo “tras bambalinas” y no aparecer. Es un eficiente miembro de equipo, dispuesta a seguir los lineamientos de quien lidere el proyecto, evitando el protagonismo (aunque lo merezca). Minimiza sus logros por un falso concepto de humildad y puede sufrir del Síndrome del Impostor o de Síndrome de Solomon.

 

¿Ya la viste? Cree que aun no está lista y se aleja del protagonismo. No se arriesga por miedo a fallar y eso la aleja del éxito.

 

 

La Damisela en Apuros

 

Es una mujer “dulce” y “delicada” como una princesa de cuentos. Vive en la certeza que está destinada a ciertas actividades “propias del género” y se aleja de las tareas pesadas y las conversaciones complejas. Puede utilizar la seducción desde la “debilidad” para lograr sus objetivos.

 

¿Sabes cuál es? Puede llegar a confundir feminidad con fragilidad y deliberadamente muestra esa fase de su personalidad.

 

 

La colibrí

 

Salta de un proyecto a otro, de acuerdo con la tendencia de moda. Se requiere de mucha concentración para seguirle el paso, ya que su mente viaja a toda velocidad, al igual que sus intereses. Con facilidad deja asuntos inconclusos, porque pierde el interés y salta a otra cosa.

 

¿La conoces? Se enciende de entusiasmo con la misma velocidad con que pierde el interés y lo abandona, porque otro proyecto captura su atención y se enfila hacia él con toda su energía.

 


 

Tu marca personal no es un logotipo o una selección de colores; tu marca personal eres tú; tu personalidad, forma de ver el mundo, de hacer las cosas…

 

La impresión que las otras personas tienen de ti va a impactar en esa marca, ya que no se trata de lo que quieres proyectar, sino de lo que proyectas, aun sin darte cuenta.

 

Por eso, es importante reconocer con qué arquetipos te estás identificando, para que puedas actuar conscientemente y con claridad, haciendo los ajustes que quieras hacer a tu marca personal.

 

Para ello, te dejo algunas preguntas para tu reflexión:

 

  • ¿En cuál (o cuáles) de estos arquetipos modernos te ves reflejada?
  • ¿Estás consciente de la imagen que estás proyectando con tus acciones, reacciones y conversaciones?
  • ¿Es la imagen que quieres dejar en otros?
  • ¿Tienes claro el impacto que esto tiene en tu marca?
  • ¿Tu marca personal es lo que quieres que sea?

 

Espero tus comentarios.

 

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    2 Comentarios

    1. Anais C Marrero S says:

      Siempre un placer leerte esa mezcla de educar entretenidamente te hace única !!!
      Gracias me disfrute el contenido !!!

      1. Milena Figueroa Leal says:

        Muchas gracias Anais, un placer y un orgullo para mí que está plataforma me haya publicado.
        Pendiente que se viene el workshop sobre Arquetipos Femeninos Modernos y su impacto

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